Hoy vamos a
preparar una apetitosa merienda, crepes. Estas crepes con harina sin gluten son
verdaderamente exquisitas y si me apuran mucho creo que hasta más ricas que las
que se elaboran con harina de trigo. La foto no puede transmitir la textura y
la suavidad del experimento, entonces os animo a prepararlas y disfrutar el
encuentro.
Vamos a la cocina
y comenzamos. En un bowl cascamos dos huevos y los batimos con dos cucharadas
de azúcar. Le agregamos dos cucharadas de harina y continuamos batiendo hasta
homogeneizar la masa. Le sumamos un vaso de leche y seguimos batiendo con otras
dos cucharadas de harina. Batimos muy bien para no encontrarnos con grumos y le
sumamos por último otro vaso de leche. Dejamos reposar la masa unos diez minutos antes de comenzar a preparar las crepes. En una sartén especial para
crepes ó de lo contrario en una sartén mediana, vaciamos una cucharilla de
mantequilla. Cuando comienza a humear volcamos con un cucharón una cantidad de
masa y esparcimos sobre la superficie, Es preferible que las crepes no queden
demasiado gruesas. Dejamos que se cocine de un lado y damos la vuelta. En este
paso no os complico así que utilizar una espátula para ayudarse a voltear las
crepes. Con más práctica deberéis dar vuelta la masa en el aire. Dejamos que se
cocine otro par de minutos del otro lado y la quitamos. Acomodamos en un plato
y reservamos para luego. Terminamos de hacer toda la masa de la misma manera
que la primera. Una vez concluidas y si han quedado algunas después de que
todos han entrado en la cocina a probar, las podemos rellenas con mermelada,
dulce de leche ó simplemente con azúcar. Dicho esto, nos quedamos con la satisfacción del trabajo bien terminado y el
placer de los que serán beneficiados por este delicioso plato, que no tiene
precio.
“El
Cocinero en casa”
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